El canciller apuntó que la verdadera discusión de cara a las elecciones no tiene que ver con "los nombres" sino con los "modelos".
El canciller Santiago Cafiero afirmó que el país que se debate es “una Argentina de futuro, no de nombres y de egos”, en referencia a las elecciones de este año, y reafirmó que se presentarán “dos modelos”, uno “extractivista” y otro “de empleo y producción”.
“La Argentina que se debate es una Argentina de futuro, no es una Argentina de nombres y de egos. La construcción política es colectiva, no se basa en decisiones personales”, expresó Cafiero en declaraciones a Radio Urbana Play, al ser consultado sobre si el presidente Alberto Fernández se presentará para la reelección.
El canciller agregó que la verdadera discusión no tiene que ver con “los nombres” sino con los “modelos”.
“La Argentina del futuro va a tener dos modelos bien claros: un modelo extractivista, de dólar fácil, que busca volver a la timba financiera; y un modelo de producción y de empleo que lo que quiere es incorporar tecnología para el desarrollo productivo de nuestros recursos naturales”, explicó el funcionario.
Y diferenció: “Una cosa es el peronismo y otra cosa es Juntos por el Cambio (JxC), ese es el punto”.
Asimismo, reiteró que Fernández “viene siendo muy claro de que va a trabajar para que el peronismo gane” y “no sólo por una cuestión partidaria” sino por “un convencimiento de que la Argentina que viene tiene que ver con cimientos que se están construyendo en esta gestión”.
“La política exterior del peronismo es pragmática, defiende y se alinea con los intereses de los argentinos y argentinas”, señaló.
También destacó Cafiero el “fuerte trabajo” que viene desarrollando el Presidente “en la integración latinoamericana y caribeña” y el reconocimiento que tienen a nivel internacional “los logros conseguidos al haber articulado una región que estaba dividida”.
Consultado sobre la reciente visita del mandatario a Estados Unidos, donde fue recibido por el presidente Joseph Biden, el jefe de la diplomacia resaltó el carácter “pragmático” de la política exterior argentina.
“Recibimos con los brazos abiertos inversiones chinas y americanas porque necesitamos generar trabajo y, asimismo, equilibramos nuestra balanza comercial”, destacó Cafiero.